Alejandro fundó SIWOK para trabajar con los pueblos originarios del Chaco Salteño. Mediante perforaciones hechas por ellos mismos, los pueblos wichís logran proveer de agua a sus comunidades, para así sembrar y generar alimento en un clima hostil. SIWOK promueve la agricultura familiar mediante sistemas de uso eficiente del agua y además otorga herramientas clave, como semillas de buena calidad y mangueras de goteo.
Más del 50% de los niños (de 0 a 5 años) de las comunidades con las que trabaja SIWOK está en riesgo nutricional. Para contrarrestar esta realidad, SIWOK promueve la producción de alimento. Cuentan con una red de maestros Wichí, conectados por teléfono celular, para capacitar a las comunidades sobre el acceso al agua mediante perforaciones y su uso para el cultivo.
La Fundación opera en tres regiones: el Pilcomayo, donde más de 100 familias siembran cultivos de verano con este sistema; la Ruta 81, donde sembraron 96 familias en la última campaña 2014-2015; y en la Ruta Provincial 56, donde hay ahora 18 invernaderos que producen tomate.
“Hay mucho que me motiva: La necesidad de la gente, la idea de que se debe usar los talentos que se le han dado a cada uno para producir más talentos, la responsabilidad que surge de haber tenido una educación privilegiada… Ahora siento que puedo afectar a la realidad de esta gente olvidada, dando el ejemplo de trabajos concretos para que las autoridades le den mayor escala e inviertan bien los recursos.”